La arquitectura ecológica enfocada en criterios ESG (Medioambiente, Social y Gobierno Corporativo) es una forma de diseño que busca crear un entorno de construcción y vivienda sostenible. Esto significa que los edificios deben ser diseñados de una manera que minimice el impacto ambiental, mejore la calidad de vida de los residentes y fomente la responsabilidad de los gobiernos corporativos.

El significado de ESG es incluir aspectos como el medio ambiente, el valor social y la gobernanza en una visión de negocio que la hace más sostenible. ¿Cómo se logra? Mediante la reducción del uso de energía y recursos, la mejora de la calidad del aire interior, el empleo de materiales reciclados y el diseño de entornos saludables y equilibrados.

Además, busca reducir la huella de carbono, aumentar la utilización de energías renovables y mejorar la eficiencia de los recursos. Esto logra una mejor calidad de vida para los residentes, una menor demanda de recursos y un mejor ambiente para el futuro.

Los principales elementos de esta arquitectura incluyen:

  • La construcción con materiales reciclados o reciclables.
  • La utilización de energías renovables para la producción de electricidad y calor.
  • La reducción de agua y desechos.
  • El aislamiento para reducir la pérdida de energía.
  • El uso de tecnologías innovadoras para mejorar el empleo de la energía.
  • El diseño de espacios para promover la salud y el bienestar.

Esta arquitectura también se centra en el uso de procesos de construcción y operaciones que minimicen el impacto social de los proyectos, como la contratación de trabajadores locales y la creación de empleos de calidad.

Los factores ESG son el nuevo KPI de una empresa, ya que son una forma de medir la sostenibilidad de un negocio cada vez más utilizado, sobre todo por aquellos inversores que requieren evaluar la rentabilidad de una empresa

ESG, criterios ambientales, sociales y de gobierno corporativa

El factor ambiental busca medir el impacto de nuestra actividad en el entorno. Esto incluye el impacto sobre el suelo, el aire, el agua, la flora y fauna, la energía, los materiales y la salud humana.

También evalúa cómo la actividad puede afectar el equilibrio ecológico y el cumplimiento de regulaciones ambientales. El análisis de factor ambiental se lleva a cabo para determinar qué medidas se deben tomar, para reducir el impacto sobre el medio ambiente. Y, también, para asegurar que se cumplan los estándares de calidad ambiental. El análisis de factor ambiental también se utiliza para identificar oportunidades de mejora del medio ambiente.

Por otro lado, el factor social trata de sensibilizarnos acerca de cómo nuestra actividad puede aportar beneficios al planeta y a nuestra sociedad. Esta forma de pensar nos permite evaluar los impactos sociales de nuestras decisiones.

Algunos ejemplos de este factor incluyen la reducción de la contaminación, la mejora de la calidad de vida de las personas, el desarrollo de la comunidad, el respeto por los derechos humanos y la diversidad cultural, entre otros. Esta perspectiva nos obliga a considerar la responsabilidad social asociada con nuestras acciones. Por lo tanto, el factor social nos ayuda a evaluar los efectos de nuestras decisiones en la sociedad y nos invita a actuar de manera responsable.

Por último, el factor de gobierno corporativo se refiere a los principios, procedimientos y procesos que forman parte del marco institucional de una organización. Estos están diseñados para asegurar la sostenibilidad de la organización. ¿Cómo? A través de la creación de valor para los accionistas y la protección de los intereses de los inversores, la dirección de la empresa y los empleados.

El gobierno corporativo también incluye una serie de mecanismos que ayudan a la empresa a prevenir y gestionar los riesgos, así como a mantener una estructura de responsabilidad clara. Estos mecanismos incluyen la adopción de prácticas de buen gobierno como la rendición de cuentas, la transparencia y la vigilancia.

Los criterios ESG se posicionan en Aprotecnic

A raíz del cambio climático, el mundo de la arquitectura ha tenido que replantear su metodología de trabajo e implementar numerosas medidas, para poder frenar el impacto medioambiental que nuestro sector o el de la construcción produce. Apostar por la sostenibilidad ha sido, sin duda, la opción más adecuada y eficaz para poder solventar este problema.

Conscientes de esta realidad, en Aprotecnic nos hemos decantado por una arquitectura sostenible y verde, en la que empleamos distintas herramientas de estudio y evaluación del Impacto Medioambiental. ¿El objetivo? Respetar nuestro planeta, pero siempre teniendo presentes las necesidades sociales y el desarrollo económico.

También tenemos presente que la eficiencia energética es una pieza clave en la mejora de cualquier compañía. No obstante, muchas de las empresas de hoy en día asumen los costes energéticos como fijos.

¡Esto puede cambiar! Y es que es primordial modificar el uso que hacemos de este tipo de energía. Por este motivo, en Aprotecnic tenemos el objetivo de analizar el perfil energético del cliente y plantearle una solución distinta y más idónea. De esta manera, mejoramos el consumo, disminuimos el importe energético y reducimos el impacto medioambiental.

¿Quieres apostar por una empresa como la nuestra, en la que los criterios ESG están siempre presentes en cada proyecto y en cada actividad? No dudes en ponerte en contacto con nosotros para explicarnos tus ideas, ¡y que las podamos hacer realidad!

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